Ayer aprendíamos que cuando
recibimos a Cristo y lo reconocemos como Salvador y Señor de nuestras vidas, él nos da vestido de salvación eterna. (Is.61:10) PDT
La vida cristiana es parecida a
darnos un baño y cambiar la ropa sucia que llevamos por una ropa limpia.
Recibir el vestido
de salvación es despojarnos de lo que antes hacíamos que era desagradable a
Dios y revestirnos de la nueva naturaleza; la del nuevo hombre que se va
renovando a la imagen de Dios, para llegar a conocerlo plenamente. (Colosenses 3:
9,10)
Ahora nos ponemos
un vestido nuevo que no es un trabajo terminado, sino que cada día se va
renovando y progresando continuamente hacia la perfección por el conocimiento
hasta el conocimiento perfecto de Dios que excluye el pecado. (Efesios 4:23,24)
Dios nos ha dado su Espíritu que
nos capacita para llevar una vida santa, nos ha dado Su Palabra para que
podamos conocerle, tener parte en su Reino y no nos suceda como el hombre que fue echado a la oscuridad de afuera porque
no estaba vestido con traje de boda. (Mateo 22:11,13)
La clave
es ser diligente en conocer al Rey a través de su Palabra.
ORO para que decidamos no solo
recibir el vestido de salvación que nos da el Rey, sino que cada día nos
revistamos de la nueva naturaleza que hemos recibido renovando nuestra mente
por el conocimiento de Dios a través de Su Palabra. En el nombre de Jesús.
Amén.
DIOS TE BENDICE
FUENTES:
Las citas bíblicas fueron tomadas de la Biblia versión DHH.
Comentarios
Publicar un comentario