Cada amanecer es un nuevo comienzo, una nueva
oportunidad, es sinónimo de que aún hay tiempo para hacer mejor las cosas y
caminar como Dios quiere, seguir adelante y no rendirse. Hemos tomado decisiones equivocadas, nos
hemos dejado llevar por los sentimientos, deseos o por las presiones de otros.
Así que pecamos y nos encontramos lejos de Dios. ¿Nos dará Dios una segunda oportunidad? ¿Qué
tenemos que hacer?
¡Claro que el Señor
nos dará otra oportunidad! Él no solo
quiere perdonarnos, también quiere levantarnos para que avancemos y crezcamos;
Él no nos abandona en las consecuencias de nuestros pecados. Envió a Su Hijo a
morir por nosotros para mostrarnos Su gran amor cuando todavía éramos
pecadores.
Si ponemos toda
nuestra esperanza en Él, si confesamos nuestro pecado, si lo buscamos con fe,
si confiamos en Su Palabra; Dios nos levantará y empezaremos un nuevo comienzo.
Si el pasado nos
abruma por un error que hayamos cometido, pidámosle ayuda al Señor. La
autocompasión incrementará la desesperanza y nos impedirá que miremos hacia el
futuro.
En el Salmos 130: 1,5; el
salmista dice:
“Desde
lo más profundo de mi desesperación, oh Señor, clamo por tu ayuda. Escucha mi
clamor, oh Señor. Presta atención a mi oración. Señor, si llevaras un registro
de nuestros pecados, ¿quién, oh Señor, podría sobrevivir? Pero tú ofreces
perdón, para que aprendamos a temerte. Yo cuento con el Señor, sí, cuento con
él; en su palabra he puesto mi esperanza.
DIOS
TE BENDICE
Pienso que en este tiempo en el cual estamos viviendo debemos colocar toda nuestra esperanza en DIOS, confesar nuestros pecados, y sobre todo buscarlo con fe, confiar plenamente en Su Palabra; Dios nos levantará y empezaremos un nuevo comienzo.
ResponderEliminarATRÉVETE A SER DIFERENTE